Primero
el negro, por aquello de querer cambiar a mejor y no encontrar las
alas necesarias para elevar el vuelo. Ausencia que nos privó de
esta pequeña ventana en la que mostrar al aire de la calle las cosas
que hacen nuestras asambleas; quehaceres con el tinte propio de Cruz
Roja que se viste de servicio a los más vulnerables, ya por la
pobreza, la discapacidad, la redención de penas carcelarias, el
sida, la droga, la acumulación de años que aúnan historias de
luces y sombras pero que aparcan en nuevas necesidades y carencias de
toda índole con la vejez.
Hacer
para y con la población: prevenir, salvar, acompañar, defender,
formar..., resolver lo que está a nuestro alcance y reclamar una
justicia social que libre de raíz situaciones que se van
anquilosando en nuestra tierra.
Ahora, de
nuevo la luz, la imagen, el texto, para comunicar, para oír lo que
nos quieran decir, para compartir en definitiva el qué podemos hacer
por la sociedad y en qué nos pueden ayudar a favor de la parte más
débil y debilitada de la población.
Saludos
de nuevo desde esta ventana a las calles de nuestra región y a todos
aquellos que quieran apoyarse en nuestro alféizar.
¡Podéis
pasar!
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